Bellsola Champú de Arcilla y flor de Azufre, 250 cc.

Código nacional:000671

¿Qué es y para qué sirve Bellsola Champú de Arcilla y flor de Azufre?

Bellsola Champú de Arcilla y flor de Azufre es un champú orgánico elaborado para limpieza eficaz del cabello. Su fórmula especializada incorpora finísimas arcillas y extracto de flor de azufre en solución jabonosa neutra, que ofrece un efecto regulador que contribuye a reducir el exceso de grasa y respeta el pH natural de la piel.

¿Cuáles son sus beneficios?

Los componentes de este champú pueden:

- Ayudar a reconstituir el cabello maltratado desde la raíz hasta las puntasy favorecer una apariencia saludable.

- Promover la desaparición de la caspa.

- Eliminar el exceso de grasa y los residuos de contaminantes que debilitan el cabello.

¿Cómo usar Bellsola Champú de Arcilla y flor de Azufre?

Aplicar una cantidad generosa sobre el cuero cabelludo y realizar suaves masajes hasta hacer espuma, posteriormente aclarar con abundante agua. Se recomienda aplicar dos veces por semana.

Presentación

Envase de 250 cc.

Consejo Farmacéutico

El Bellsola Champú de Arcilla y Flor de Azufre se recomienda para quienes buscan un cuidado capilar que ayude a mantener el equilibrio natural del cuero cabelludo. La arcilla es conocida por su capacidad para absorber el exceso de grasa, lo que favorece una sensación de limpieza prolongada. Por otro lado, la flor de azufre es valorada por sus propiedades que pueden contribuir a calmar el cuero cabelludo, ayudando a reducir la sensación de irritación.

Se aconseja aplicar el champú sobre el cabello mojado, masajeando suavemente para permitir que los ingredientes actúen de manera efectiva. Es importante enjuagar con abundante agua para eliminar cualquier residuo. Se recomienda evitar el contacto con los ojos y, en caso de producirse, aclarar inmediatamente con agua abundante.

Este producto es adecuado para uso frecuente, pero se sugiere consultar con un profesional de la salud en caso de tener condiciones específicas del cuero cabelludo. Mantener fuera del alcance de los niños y almacenar en un lugar fresco y seco para preservar sus propiedades.